lunes, 14 de julio de 2014

Tarta Guiness (Con chocolate y cerveza negra)

Buenos días!! ¿Cómo va el verano? Yo empiezo la semana con unas ganas enormes de cocinar así que para que os unáis a mi hoy os traigo una receta muy peculiar que puede que a muchos os choque. Los que me leáis sabéis que me gusta mucho probar nuevas recetas y hacer inventos en la cocina, así que os animo a que probéis nuevos sabores y esta tarta es una buena forma de empezar.




La tarta Guiness, es un bizcocho de chocolate y cerveza negra cubierto de una crema de nata y queso, así se imita a la cerveza ya que el bizcocho sería la cerveza negra y la crema la espuma. Es una tarta con un sabor espectacular ya que la combinación del chocolate, el toque que le da la cerveza y la crema es perfecto, además la textura que tiene gracias a la cerveza y a la mezcla de ingredientes de esta receta es muy interesante.



Si tenéis niños y os preocupa hacer este postre ya que lleva cerveza no os preocupéis, durante la cocción el alcohol de la cerveza se evapora y no hay peligro para los más peques de la casa.

Bueno sólo me queda decir que es una de las tartas más sencillas de hacer y el resultado como veis es muy vistoso y perfecto para sorprender, yo en este caso la hice para el cumpleaños de mi padre y sorprendió a todos, ya que nadie espera encontrar cerveza en una tarta y después de probarla quedaron encantados con el sabor.

Vamos con la receta...

Ingredientes para el bizcocho ( esta receta es para un molde de 10 a 17 cm de diámetro, de ser más grande os quedaría muy bajito):

  • 1 huevo 
  • 200 gr de azúcar
  • 125 gr de mantequilla a temperatura ambiente
  • 125 gr de cerveza negra (Yo utilicé marca Guiness, pero podéis utilizar otra)
  • 125 gr de harina 
  • 40 gr de cacao puro en polvo azúcar
  • 12 gr de bicarbonato
  • 1 cucharadita de esencia de vainilla
  • 70 ml de nata 
  • 1 pizca de sal
Precalentamos el horno a 160º-170º.

Ponemos en un cazo la cerveza y la calentamos hasta que comience a hervir.



Retiramos el cazo del fuego y añadimos la mantequilla, removemos hasta que se mezclen por completo y reservamos.



En un recipiente mezclamos todos los ingredientes secos (la harina, el azúcar, la sal, y el bicarbonato), y los tamizamos, reservamos.



En otro recipiente ponemos el huevo y con unas varillas lo espumamos un poco.



Añadimos la nata, la esencia de vainilla, y la mezcla de cerveza y la mantequilla que teníamos reservadas, y con la ayuda de unas varillas batimos un poco.



Por último, añadimos los ingredientes secos tamizados y con una espátula mezclamos hasta que tengamos una masa homogénea.



Una vez lista nuestra masa, la metemos en un molde engrasado, en este caso yo he utilizado uno de 17 cm.



Metemos en el horno y la dejamos durante unos 40-45 minutos, yo durante la cocción tapé el bizcocho con un papel de aluminio para que no se tostase demasiado.

Podemos comprobar que está hecho cuando al introducir un palillo salga limpio, en este momento está listo y lo podemos sacar del horno.

Dejamos enfriar primero en el molde y luego sobre una rejilla. No os asustéis si el bizcocho os sale muy oscuro o incluso negro, de hecho cuanto más oscuro mejor, ya que así conseguiremos que el resultado imite mejor a la cerveza negra.




Mientras se enfría preparamos la crema.

Ingredientes para la crema:

  • 125 gr de queso crema
  • 150 ml de nata para montar
  • 60 gr de azúcar glas
En primer lugar montamos la nata, tampoco hace falta conseguir una nata muy dura, sino simplemente que monte y coja consistencia, reservamos.



En otro recipiente mezclamos bien el queso y el azúcar glas, hasta conseguir que quede cremoso y suave, no hay que batir demasiado ya que nos puede quedar demasiado líquido.



Añadimos un poco de nata a la mezcla de queso y azúcar, y con la ayuda de una espátula mezclamos. Vamos añadiendo poco a poco más nata y veremos cómo va cogiendo consistencia la crema.




Este es el resultado final de nuestra crema.



Para acabar  montamos nuestra tarta.

Ponemos nuestro bizcocho ya frío en un plato, es importante que esté totalmente frió ya que sino se nos derretiría la crema.
 


Ponemos una buena cantidad de crema en la parte superior y con la ayuda de una espátula repartimos la crema dejando que caiga un poco por los laterales intentando imitar la espuma de la cerveza. Si es necesario ir añadiendo más hasta conseguir el resultado deseado.



Y con esto hemos acabado nuestra tarta.



¿A que tiene buena pinta?



Sin duda os animo a hacerla, no os defraudará.

Espero que os haya gustado y seguro que os sale perfecta :)








2 comentarios:

  1. Que buena ! me encanta esa tarta :) un beso!

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    1. Estaba buenísima, la volví a repetir otra vez en el mismo fin de semana :)

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