Flor de pan y queso camembert (paso a paso)

Buenos días!! ¿Cómo va la semana? Yo sigo liada con la facultad entre trabajos y exámenes pero aun así saco un poco de tiempo para cocinar. Hoy os traigo una receta para sorprender, muchas veces nos vemos ante una fecha especial o algún acontecimiento en que queremos hacer algo fuera de lo normal y no sabemos que hacer, esta es una receta para estos momentos en los que queremos dejar a todos con la boca abierta.

 

Se trata de un pan con una decoración muy singular. Tiene una forma de flor alrededor de un queso camembert entero. Lo más interesante es que cuando lo servimos y lo abrimos encontramos la crema del queso que se ha derretido el  horno, así tenemos un plato estilo fondue, presentado de una manera muy original y divertida.

Como os he dicho es perfecto para las ocasiones especiales ya que combina una presentación original con un sabor perfecto para los amantes de queso.

AVISO A COCINEROS Y COCINERAS, para hacer este plato es necesario tener un poco de tiempo y de paciencia, cómo veréis en las fotos del paso a paso es un poco más laborioso que hacer un pan normal, pero os aseguro que merece la pena, ya que nos quedará un pan crujiente, laminado, que combina a la perfección con el queso. Una delicia os lo aseguro.

Ingredientes para el pan:

• 600 gr de harina
• 325 ml de leche tibia 
• 25 gr de levadura
• 10 gr de azúcar 
• 7 gr de sal 
• 1 queso camembert entero
• Un poco de mantequilla derretida para untar las láminas de masa. 

En primer lugar, diluimos la levadura en la leche y reservamos.

Si tenemos una amasadora estilo Kitchen Aid,  meteremos todos los ingredientes a excepción del queso y la mantequilla, en el bol y amasaremos a velocidad baja durante unos 20 minutos hasta conseguir una textura homogénea y elástica.

Si lo vamos a hacer manualmente, yo os aconsejo que en un bol pongáis los ingredientes secos, la harina, el azúcar y la sal, y mezclar. A continuación, añadir poco a poco la leche con la levadura disuelta y amasar hasta conseguir el mismo resultado que con la máquina.

Un truco si no tenéis mucho tiempo para amasar es utilizar una técnica de reposo, es decir,  una vez tengáis una masa hacéis una bola y le hacéis 5 pliegues hacia el centro, es decir cogemos una "esquina" y la estiramos hacia el centro, repetimos esto 5 veces y la dejamos reposar durante 15 minutos. Repetimos este proceso dos o tres veces.

Una vez lista la masa, la dejamos reposar hasta que doble su volumen, yo la deje aproximadamente durante 2 horas.

Una vez transcurrido el tiempo, amasamos un poco la masa para quitarle el aire y  dividimos la masa en 7 trozos, 6 de unos 140 gr y uno de unos 120 gr.

Hacemos una bola con los 6 trozos más grandes, el otro lo reservamos, y con la ayuda de un rodillo alisamos cada bola hasta que nos quede una lámina redonda bastante fina. Hacemos este proceso con todas las bolas.

Una vez tengamos todas, cogemos una y la pintamos con mantequilla derretida, a continuación ponemos otra lámina encima.

Repetimos el proceso hasta llegar a la sexta lámina que la utilizaremos para envolver las otras 5 láminas de esta manera:

Ahora haremos los cortes que darán lugar a la flor, primero hacemos 4 cortes en forma de cruz.

A continuación, dentro de cada sector haremos otro corte.

Y por último, dentro de cada nuevo sector haremos otro corte.

Cuando tengamos todos los cortes, cogemos la punta de los triángulos que hemos formado y los tiramos hacia detrás dejando en el centro un amplio círculo.

Ahora torcemos las puntas para que nos quede un diseño más bonito y con esto ya tendremos la flor acabada.

Cuando tengamos la flor acabada, envolvemos el queso. Alisamos la bola más pequeña al igual que las otras. Hacemos 4 cortes en forma de cruz y colocamos el queso en el centro.

A continuación, plegamos cada sector sobre si mismo envolviendo el queso de esta manera:

Metemos el queso dentro de nuestra flor y con esto ya tendremos acabado el pan. Dejamos reposar durante 1 hora.

Precalentamos el horno a 200ºC.

Pasado el tiempo de reposo, metemos nuestro pan en el horno durante media hora, hasta que adquiera un color dorado.

Cuando adquiera este calor lo sacamos del horno y servimos, este plato se tiene que tomar caliente.

Abrimos el queso con un cuchillo, cortamos un trocito de nuestro pan y a comer!!

Es un pan un poco laborioso pero de verdad merece la pena, os lo recomiendo.